LA REINVENCIÓN ECOLÓGICA DEL SER
Por Carlos FermÍn
Desde tiempos ancestrales, los seres humanos han conllevado una guerra sin cuartel de la que absolutamente nadie queda libre del pecado. El vació espiritual en intentar cumplir promesas: de odio, rencor y venganza que justifiquen la irracionalidad por encima del pacifismo, nos ha hecho transitar por el erróneo camino de: las armas, la soberbia y la traición que elevan la pérdida del alma, hacia ese infernal destino que nunca quisiéramos conocer.
Toda esa hostilidad, que por desgracia impera en los senderos de la Humanidad, viene teniendo como principal víctima a nuestro olvidado planeta Tierra, que no sólo es el único hábitat de vida que nos alberga con amor y genuinidad, sino que es el principal centro de ataque que el Hombre ha: irrumpido, explotado y rentabilizado a la imagen y semejanza de sus más ecocidas deseos.
Los ecosistemas y la biodiversidad que reina en la geografía de la Naturaleza a escala global, han sido el blanco fácil de un nocivo proceso de industrialización, que poco a poco, fue despojando a la “Pachamama” de sus recursos naturales, por causa de un canibalismo corporativo que aprovecha el mercado consumista de la Sociedad Moderna, para seguir sacando la renta que atesoran los minerales que yacen en la sombra de nuestros pasos.
A su vez, los dogmas, el racismo, las drogas y la anarquía que acorralan a la población del Mundo, ha creado espejismos en el dualismo que se plantea al adaptar un modo de vida a una idiosincrasia. La necesidad de: poblar, destruir, seguir poblando, seguir destruyendo y volver a poblar lo autodestruido, para fructificar el interés personalista por encima del bien colectivo, es una absurda filosofía que se viene apoderando de la mente de muchos individuos.
La gran mayoría de los medios de Difusión Social, sean en el ámbito impreso, radioeléctrico o telemático, se han confabulado con las trasnacionales que operan ese círculo vicioso comercial, para crear en la gente la necesidad de obtener productos y servicios, sin considerar aspectos intrínsecos a su obtención, elaboración y consecuencias. De hecho, muchos canales de TV de señal abierta que tienen los más altos niveles de audiencia, son parte de una misma empresa matriz, que suele alentar al público, todos esos antivalores que generan sus publicidades.
Reinvención espiritual
Para lograr un cambio positivo en la interacción Hombre-Medio, es de vital importancia el retome de valores, que aunque se perdieron en el Horizonte de las balas perdidas, creemos que es posible reorientarlos siempre y cuando exista la voluntad del ser vivo en aceptar sus solariegas heridas del pasado. De allí, que el “autodescubrimiento” emerge como una actitud proactiva de enfrentar lo que fuimos, somos y podríamos llegar a ser en el exiguo camino de la Vida.
El primer deber que nos apremia esa reflexión personal, sería dejar el vicio que las religiones ejercen en la Sociedad universal. Los dogmas, siempre crean un rol cegador de la realidad “real” que vivimos; pues por siglos, han esclavizado una verdad a cambio de rentabilizar una ayuda espiritual. Además, que en nombre de sus liturgias, la gente ha desatado la ira entre unos y otros. Muchas de las guerras más destructivas producidas por la barbarie humana, han tenido como centro de praxis, el culto a profecías bíblicas que acaban por confundir a la razón.
Luego, se tendría que replantear el enfoque de la Ciencia, vista como fuente de sabiduría que nos explica el ADN de la vida. La valía de compartir sus fundamentos teórico-prácticos, elevan la aceptación de gravitar su mensaje a la colectividad mundial, que al comprender un poco más sobre: los Planetas, el Sistema Solar, los Astros y demás fenómenos de la Galaxia, muy probablemente, se fomente el autodescubrimiento, tan necesario para no sentirnos perdidos en la soledad del Mundo que nos alberga.
Reinvención Socio-cultural
Es importante que las personas asuman su latente responsabilidad, como agentes de cambios positivos o negativos en la Interacción Hombre-Medio. Los caprichos egocentristas, siempre han sido capaces de superponer el rol personal antes que la acción social comunal, que garantizaría una mejor calidad de vida integral. Por desgracia, la familia también viene propiciando esa inicua coyuntura, pues se ha transformado en una expresión sectaria que: coopera, se solidariza y ayuda sólo dentro de su propio reducto consanguíneo.
Una forma de cambiar esa forma de pensar, sería al valorar la adopción o el apadrinamiento de niños, como una manera de disminuir los altos índices de abandono a los que se ve expuesta la infancia global. La Sociedad Moderna, fiel a sus sagrados infames prejuicios, ha etiquetado la posibilidad de adoptar a niños de la calle, como una absurdez que no debe ser considerada por los individuos. El antojo de procrear biológicamente para complacer a los: amigos, vecinos y colegas del trabajo, siempre ha sido una lamentable respuesta a la presión social que asfixia a la gente.
En paralelo, las personas deben apreciar la ética y la moral, como manifestaciones pacifistas que predisponen un clima: agradable, armonioso y bien intencionado entre todos. Es triste ver como: el individualismo, la ofensa al prójimo y la hipocresía, son antivalores que acrecientan la impunidad, la indiferencia y la intolerancia. La gente se niega a escuchar la realidad “real” que padece un extraño, quien muy probablemente, también se niega a escuchar la realidad “real” que padece la gente. Ambos, son conscientes de la apatía socio-cultural que enfrentan, pero cuando deciden reinventarse, llega de nuevo la Sociedad Moderna que los hace presos de ese inicuo estilo de vida que los castiga.
La vía para evitar esa perversa intromisión, sería dejando lo frívolo y valorando lo: humano, espiritual y natural. Vive sin la necesidad de pagar, con: tarjeta, débito o en efectivo y así no te venderás al Sistema. Pasa tiempo de calidad con tus seres queridos, dejando a un lado: los programas que transmiten en la TV, la visita online a las páginas que oferta la Web y sin la violencia que acompaña a los videojuegos. Es mejor asistir a un parque por la tarde, leer un buen libro o auto descubrirte.
Reinvención Ecológica
Cuando se logra internalizar la problemática: social, cultural y espiritual adentrada en la interacción Hombre-Medio, se establece oportunamente el deber de fulminar toda esa indiferencia ecológica que no se cansa de corromper a la Tierra. La tala de árboles, la deposición de basura a cielo abierto, el abuso del consumo eléctrico, la venta ilegal de fauna exótica y el contaminar las cuencas hidrográficas, son algunos de los anónimos ecocidios que se fraguan en esa diaria infamia.
Presionar el gatillo de la lucha por reivindicar los derechos de la “Pachamama”, aflora la obligatoriedad de la gente, en replantear la forma y el fondo de su convivencia con los recursos naturales. Apagar las luces del hogar cuando no haya necesidad de encenderlas, es un buen primer paso para valorar el arte de la ecología. Cambia los bombillos incandescentes por luces de bajo consumo, que ahorran hasta un 80% de energía. No dejes prendidos en vano los equipos electrónicos que empleas con frecuencia, sea el TV, la laptop, el reproductor DVD y aparatos similares. Desenchufa el cargador del teléfono celular, después que la batería se cargó, pues la “energía en espera”, sigue activa en la toma de corriente.
No abuses en el uso del: microondas, el freezer y la secadora, ya que luego cuando te llegue la factura mensual por el consumo eléctrico, no tendrás excusas que justifiquen el anticipado enojo por descubrir. También, emplea de forma “racional” el Aire Acondicionado, debido a que su continua utilización a escala global, ha sido uno de los inicuos precursores del llamado “Calentamiento Global”, que viene afectando gravemente al planeta Tierra. Esos equipos tienen un ajuste digital de temporizador, que permite apagarlos y seguir disfrutando de la sensación térmica sin destruir a la Naturaleza.
Si vas a lavar la ropa, la vajilla o los muebles, no despilfarres el caudal de agua potable que sale del grifo, pues el privilegio de emplear ese vital líquido, es un derecho universal en peligro de extinción. Incentiva una cultura ahorrativa entre toda tu familia. Adopta en tu cotidianidad a las llamadas 3 “R”, que se refieren al deber: de reciclar, reutilizar y reducir. Al momento de desechar la basura, tienes que separar los restos dependiendo al tipo de material, sea: vidrio, cartón, plástico, metal, etc.
De necesitar imprimir: textos bajados de la Internet, documentos para la universidad o gráficos empresariales, te sugerimos NO hacer clic en “Imprimir”, hasta que te hayas percatado que el trabajo quedó listo para reproducirlo en físico. Recuerda que existen opciones para pre visualizar los contenidos antes de imprimirlos. Además, muchas veces se imprimen materiales de consulta que se podrían ver en la pantalla del PC, sin necesidad de llevarlos al papel. Esas consideraciones, te harán ahorrar tinta, pulpa de celulosa y tiempo que aprovechar en otras actividades.
Debido a la deforestación global, la paz “verde” de los ecosistemas y su biodiversidad, cada vez se encuentra más expuesta a la mano irracional del Hombre que los rentabiliza. Te recomendamos, propiciar la realización de campañas ecológicas dentro de tu comunidad, que incluyan: sembrar árboles, sanear ríos y denunciar a quienes atenten contra especies de fauna, el Medio Ambiente o áreas legalmente protegidas. No asistas a “Circos” o eventos públicos en los que exponen a los animales, ya que siempre los maltratan para conseguir el lucro ecocida ajeno.
Hay que fomentar el empleo de las energías renovables que sean “amigables” con la Naturaleza y que permitan un verdadero “Desarrollo Ecológicamente Sostenible” a escala global. La energía eólica, impulsada por el ir y venir de las corrientes de aire. La energía solar, que gracias a los paneles solares, canaliza la fuerza del Astro Rey en proyectos de vida sustentables o la energía hidráulica, que se vale de todo lo cinético que yace en las profundidades del mar, para crear entornos “limpios” por doquier.
Es de suma importancia, el interés de: los gobiernos, organismos públicos y privados en conocer, instalar y aprovechar dichas iniciativas en la diaria interacción de los pueblos y sus habitantes. El empleo de energías alternativas, disminuiría el “Efecto Invernadero”, que es un flagelo latente conllevado por la retención de gases en la atmósfera, tras la quema de combustibles fósiles que se transforman en ingestas químicas nocivas para la Tierra, como el: CO2, CH4 o el NF3. De allí, que el llamado “Cambio Climático”, ejercería un menor impacto ambiental, pues la Naturaleza tendría un mayor equilibrio ecológico que le garantice la regeneración de su propia fuente de vida.
El gran problema, es que tanto las empresas trasnacionales como las agendas públicas de los gobiernos, se niegan a ponderar con verdadero criterio, las propuestas ambientales tangibles que forjarían la sinergia ecológica tan necesaria para que realmente se pretenda crear un Mundo más “verde” entre todos. Hoy en día, el desarrollo de proyectos ecosustentables, es una infame utopía por revelar. De hecho, en la pasada “Cumbre de la Tierra” Río +20, realizada en junio de 2012, en el país sureño de Brasil, fácilmente se hizo lectura de la indiferencia ambiental que vivimos.
La mayoría de las Naciones y sus delegados, se negaron a presentar señales positivas de cambio en la interacción Hombre-Medio, aludiendo al inicuo interés económico, como la razón principal para negarse a firmar estrategias mancomunadas proconservacionistas. La oficialmente llamada “Conferencia de Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo”, dejó un cruel gran signo de interrogación en el incierto futuro de la Madre Tierra, sobre todo, porque los países que más contaminan al Mundo, como EEUU o China, no establecieron lapsos de tiempo y medidas contundentes para disminuir la toxicidad de sus garras ecocidas
Pese a ello, vemos con alegría el logro de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba), integrada por naciones como: Venezuela, Bolivia y Ecuador, en que se firmara un documento que pretende crear una “economía social verde”, en pro de respetar la soberanía para con los recursos naturales que dispone cada geografía.
A su vez, el Movimiento Social Zeitgeist, que propone un reenfoque holístico del binomio: Hombre-Medio, se presenta como una opción de cambio positiva al valorar el método científico que se erige dentro del proceso de interculturalidad humana, para estimar nuestra relación con la Naturaleza y por ende, mejorar la calidad de vida de todos los individuos.
No cabe duda, que la única forma de apaciguar el llanto de la olvidada “Pachamama”, ante toda la perversidad que la inunda, es reinventando la forma en que se interactúa a diario con el Ambiente, ya sea desde: el hogar, las aulas de clase, las oficinas de trabajo, en las afanosas calles o en cualquier otro lugar en el que la luz ecológica deba guiar el camino por el que transitamos. Si cada quien se ha de responsabilizar con el cuido del planeta Tierra y se compromete a poner en práctica todas las exhortaciones en alto contraste presentadas, será el gran preludio de una Sociedad Moderna mucho más “verde” por descubrir.
EMAIL: [email protected]
Toda esa hostilidad, que por desgracia impera en los senderos de la Humanidad, viene teniendo como principal víctima a nuestro olvidado planeta Tierra, que no sólo es el único hábitat de vida que nos alberga con amor y genuinidad, sino que es el principal centro de ataque que el Hombre ha: irrumpido, explotado y rentabilizado a la imagen y semejanza de sus más ecocidas deseos.
Los ecosistemas y la biodiversidad que reina en la geografía de la Naturaleza a escala global, han sido el blanco fácil de un nocivo proceso de industrialización, que poco a poco, fue despojando a la “Pachamama” de sus recursos naturales, por causa de un canibalismo corporativo que aprovecha el mercado consumista de la Sociedad Moderna, para seguir sacando la renta que atesoran los minerales que yacen en la sombra de nuestros pasos.
A su vez, los dogmas, el racismo, las drogas y la anarquía que acorralan a la población del Mundo, ha creado espejismos en el dualismo que se plantea al adaptar un modo de vida a una idiosincrasia. La necesidad de: poblar, destruir, seguir poblando, seguir destruyendo y volver a poblar lo autodestruido, para fructificar el interés personalista por encima del bien colectivo, es una absurda filosofía que se viene apoderando de la mente de muchos individuos.
La gran mayoría de los medios de Difusión Social, sean en el ámbito impreso, radioeléctrico o telemático, se han confabulado con las trasnacionales que operan ese círculo vicioso comercial, para crear en la gente la necesidad de obtener productos y servicios, sin considerar aspectos intrínsecos a su obtención, elaboración y consecuencias. De hecho, muchos canales de TV de señal abierta que tienen los más altos niveles de audiencia, son parte de una misma empresa matriz, que suele alentar al público, todos esos antivalores que generan sus publicidades.
Reinvención espiritual
Para lograr un cambio positivo en la interacción Hombre-Medio, es de vital importancia el retome de valores, que aunque se perdieron en el Horizonte de las balas perdidas, creemos que es posible reorientarlos siempre y cuando exista la voluntad del ser vivo en aceptar sus solariegas heridas del pasado. De allí, que el “autodescubrimiento” emerge como una actitud proactiva de enfrentar lo que fuimos, somos y podríamos llegar a ser en el exiguo camino de la Vida.
El primer deber que nos apremia esa reflexión personal, sería dejar el vicio que las religiones ejercen en la Sociedad universal. Los dogmas, siempre crean un rol cegador de la realidad “real” que vivimos; pues por siglos, han esclavizado una verdad a cambio de rentabilizar una ayuda espiritual. Además, que en nombre de sus liturgias, la gente ha desatado la ira entre unos y otros. Muchas de las guerras más destructivas producidas por la barbarie humana, han tenido como centro de praxis, el culto a profecías bíblicas que acaban por confundir a la razón.
Luego, se tendría que replantear el enfoque de la Ciencia, vista como fuente de sabiduría que nos explica el ADN de la vida. La valía de compartir sus fundamentos teórico-prácticos, elevan la aceptación de gravitar su mensaje a la colectividad mundial, que al comprender un poco más sobre: los Planetas, el Sistema Solar, los Astros y demás fenómenos de la Galaxia, muy probablemente, se fomente el autodescubrimiento, tan necesario para no sentirnos perdidos en la soledad del Mundo que nos alberga.
Reinvención Socio-cultural
Es importante que las personas asuman su latente responsabilidad, como agentes de cambios positivos o negativos en la Interacción Hombre-Medio. Los caprichos egocentristas, siempre han sido capaces de superponer el rol personal antes que la acción social comunal, que garantizaría una mejor calidad de vida integral. Por desgracia, la familia también viene propiciando esa inicua coyuntura, pues se ha transformado en una expresión sectaria que: coopera, se solidariza y ayuda sólo dentro de su propio reducto consanguíneo.
Una forma de cambiar esa forma de pensar, sería al valorar la adopción o el apadrinamiento de niños, como una manera de disminuir los altos índices de abandono a los que se ve expuesta la infancia global. La Sociedad Moderna, fiel a sus sagrados infames prejuicios, ha etiquetado la posibilidad de adoptar a niños de la calle, como una absurdez que no debe ser considerada por los individuos. El antojo de procrear biológicamente para complacer a los: amigos, vecinos y colegas del trabajo, siempre ha sido una lamentable respuesta a la presión social que asfixia a la gente.
En paralelo, las personas deben apreciar la ética y la moral, como manifestaciones pacifistas que predisponen un clima: agradable, armonioso y bien intencionado entre todos. Es triste ver como: el individualismo, la ofensa al prójimo y la hipocresía, son antivalores que acrecientan la impunidad, la indiferencia y la intolerancia. La gente se niega a escuchar la realidad “real” que padece un extraño, quien muy probablemente, también se niega a escuchar la realidad “real” que padece la gente. Ambos, son conscientes de la apatía socio-cultural que enfrentan, pero cuando deciden reinventarse, llega de nuevo la Sociedad Moderna que los hace presos de ese inicuo estilo de vida que los castiga.
La vía para evitar esa perversa intromisión, sería dejando lo frívolo y valorando lo: humano, espiritual y natural. Vive sin la necesidad de pagar, con: tarjeta, débito o en efectivo y así no te venderás al Sistema. Pasa tiempo de calidad con tus seres queridos, dejando a un lado: los programas que transmiten en la TV, la visita online a las páginas que oferta la Web y sin la violencia que acompaña a los videojuegos. Es mejor asistir a un parque por la tarde, leer un buen libro o auto descubrirte.
Reinvención Ecológica
Cuando se logra internalizar la problemática: social, cultural y espiritual adentrada en la interacción Hombre-Medio, se establece oportunamente el deber de fulminar toda esa indiferencia ecológica que no se cansa de corromper a la Tierra. La tala de árboles, la deposición de basura a cielo abierto, el abuso del consumo eléctrico, la venta ilegal de fauna exótica y el contaminar las cuencas hidrográficas, son algunos de los anónimos ecocidios que se fraguan en esa diaria infamia.
Presionar el gatillo de la lucha por reivindicar los derechos de la “Pachamama”, aflora la obligatoriedad de la gente, en replantear la forma y el fondo de su convivencia con los recursos naturales. Apagar las luces del hogar cuando no haya necesidad de encenderlas, es un buen primer paso para valorar el arte de la ecología. Cambia los bombillos incandescentes por luces de bajo consumo, que ahorran hasta un 80% de energía. No dejes prendidos en vano los equipos electrónicos que empleas con frecuencia, sea el TV, la laptop, el reproductor DVD y aparatos similares. Desenchufa el cargador del teléfono celular, después que la batería se cargó, pues la “energía en espera”, sigue activa en la toma de corriente.
No abuses en el uso del: microondas, el freezer y la secadora, ya que luego cuando te llegue la factura mensual por el consumo eléctrico, no tendrás excusas que justifiquen el anticipado enojo por descubrir. También, emplea de forma “racional” el Aire Acondicionado, debido a que su continua utilización a escala global, ha sido uno de los inicuos precursores del llamado “Calentamiento Global”, que viene afectando gravemente al planeta Tierra. Esos equipos tienen un ajuste digital de temporizador, que permite apagarlos y seguir disfrutando de la sensación térmica sin destruir a la Naturaleza.
Si vas a lavar la ropa, la vajilla o los muebles, no despilfarres el caudal de agua potable que sale del grifo, pues el privilegio de emplear ese vital líquido, es un derecho universal en peligro de extinción. Incentiva una cultura ahorrativa entre toda tu familia. Adopta en tu cotidianidad a las llamadas 3 “R”, que se refieren al deber: de reciclar, reutilizar y reducir. Al momento de desechar la basura, tienes que separar los restos dependiendo al tipo de material, sea: vidrio, cartón, plástico, metal, etc.
De necesitar imprimir: textos bajados de la Internet, documentos para la universidad o gráficos empresariales, te sugerimos NO hacer clic en “Imprimir”, hasta que te hayas percatado que el trabajo quedó listo para reproducirlo en físico. Recuerda que existen opciones para pre visualizar los contenidos antes de imprimirlos. Además, muchas veces se imprimen materiales de consulta que se podrían ver en la pantalla del PC, sin necesidad de llevarlos al papel. Esas consideraciones, te harán ahorrar tinta, pulpa de celulosa y tiempo que aprovechar en otras actividades.
Debido a la deforestación global, la paz “verde” de los ecosistemas y su biodiversidad, cada vez se encuentra más expuesta a la mano irracional del Hombre que los rentabiliza. Te recomendamos, propiciar la realización de campañas ecológicas dentro de tu comunidad, que incluyan: sembrar árboles, sanear ríos y denunciar a quienes atenten contra especies de fauna, el Medio Ambiente o áreas legalmente protegidas. No asistas a “Circos” o eventos públicos en los que exponen a los animales, ya que siempre los maltratan para conseguir el lucro ecocida ajeno.
Hay que fomentar el empleo de las energías renovables que sean “amigables” con la Naturaleza y que permitan un verdadero “Desarrollo Ecológicamente Sostenible” a escala global. La energía eólica, impulsada por el ir y venir de las corrientes de aire. La energía solar, que gracias a los paneles solares, canaliza la fuerza del Astro Rey en proyectos de vida sustentables o la energía hidráulica, que se vale de todo lo cinético que yace en las profundidades del mar, para crear entornos “limpios” por doquier.
Es de suma importancia, el interés de: los gobiernos, organismos públicos y privados en conocer, instalar y aprovechar dichas iniciativas en la diaria interacción de los pueblos y sus habitantes. El empleo de energías alternativas, disminuiría el “Efecto Invernadero”, que es un flagelo latente conllevado por la retención de gases en la atmósfera, tras la quema de combustibles fósiles que se transforman en ingestas químicas nocivas para la Tierra, como el: CO2, CH4 o el NF3. De allí, que el llamado “Cambio Climático”, ejercería un menor impacto ambiental, pues la Naturaleza tendría un mayor equilibrio ecológico que le garantice la regeneración de su propia fuente de vida.
El gran problema, es que tanto las empresas trasnacionales como las agendas públicas de los gobiernos, se niegan a ponderar con verdadero criterio, las propuestas ambientales tangibles que forjarían la sinergia ecológica tan necesaria para que realmente se pretenda crear un Mundo más “verde” entre todos. Hoy en día, el desarrollo de proyectos ecosustentables, es una infame utopía por revelar. De hecho, en la pasada “Cumbre de la Tierra” Río +20, realizada en junio de 2012, en el país sureño de Brasil, fácilmente se hizo lectura de la indiferencia ambiental que vivimos.
La mayoría de las Naciones y sus delegados, se negaron a presentar señales positivas de cambio en la interacción Hombre-Medio, aludiendo al inicuo interés económico, como la razón principal para negarse a firmar estrategias mancomunadas proconservacionistas. La oficialmente llamada “Conferencia de Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo”, dejó un cruel gran signo de interrogación en el incierto futuro de la Madre Tierra, sobre todo, porque los países que más contaminan al Mundo, como EEUU o China, no establecieron lapsos de tiempo y medidas contundentes para disminuir la toxicidad de sus garras ecocidas
Pese a ello, vemos con alegría el logro de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba), integrada por naciones como: Venezuela, Bolivia y Ecuador, en que se firmara un documento que pretende crear una “economía social verde”, en pro de respetar la soberanía para con los recursos naturales que dispone cada geografía.
A su vez, el Movimiento Social Zeitgeist, que propone un reenfoque holístico del binomio: Hombre-Medio, se presenta como una opción de cambio positiva al valorar el método científico que se erige dentro del proceso de interculturalidad humana, para estimar nuestra relación con la Naturaleza y por ende, mejorar la calidad de vida de todos los individuos.
No cabe duda, que la única forma de apaciguar el llanto de la olvidada “Pachamama”, ante toda la perversidad que la inunda, es reinventando la forma en que se interactúa a diario con el Ambiente, ya sea desde: el hogar, las aulas de clase, las oficinas de trabajo, en las afanosas calles o en cualquier otro lugar en el que la luz ecológica deba guiar el camino por el que transitamos. Si cada quien se ha de responsabilizar con el cuido del planeta Tierra y se compromete a poner en práctica todas las exhortaciones en alto contraste presentadas, será el gran preludio de una Sociedad Moderna mucho más “verde” por descubrir.
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